Aprender a ser madre - Anne Labrousse

A mí, no me enseñaron a ser madre, y, ¡que bueno!

Estoy sumamente, inmensamente agradecida de no haber aprendido a ser madre sólo porque nací niña.

Ni siquiera en la escuela de monjas, nos hablaban de papel de madre.

Solamente hablaban de orientarnos hacia una profesión adecuada a nuestras capacidades o talentos.

Mi madre tuvo cuatro hijos después de mi y jamas  tuve que tomar el papel de madre.

Se lo agradezco

Me dejó en paz

Eran mucho más importantes mis estudios que esta barbarie que es incitar las niñas a ser madres.

Cuando tuve veintidós años, tuve ganas de hacer ser madre.

Así, de repente

 Así de repente, conocí a un hombre que quería ser padre.

Juntos, hicimos un hijo.

Y el día que nació, empecé a aprender a ser madre.

Fue hermoso, maravilloso.

Lo que hacía era como yo lo quería

No escuchaba consejos

Ni nadie me los daba.

Pude aprender a ser madre a mi manera

Como yo quería

Y sin que nadie interfiriera.

Ilustración: Fotografía de Liana Mikah en Unsplash